Sacerdote: Fco ha dañado catastróficamente el papado




Un problema muy personal

El Vaticano acaba de publicar un documento de enseñanza sobre asuntos económicos. Para mí, personalmente, y no puedo hablar en nombre de nadie más, este momento resume con precisión, el problema creado por el uso indebido por parte de Francisco del `munus´ que Dios le había dado.

En cualquier momento antes de 2013, simplemente habría recibido tal documento con docilidad. En un caso como el presente, porque se trata de asuntos en los que no soy personalmente competente académicamente, hubiera hecho todo lo posible por comprenderlo, simplemente porque (aunque no como ex cathedra) me llegó con autoridad. Habría hecho todo lo posible para ponerme en la posición de poder explicarlo y recomendarlo en este blog y a las personas que me preguntaran al respecto.

Pero ahora, las cosas no son así. Durante cinco años, es probable que Fco haya jugado irresponsablemente con la autoridad puesta en sus manos. Él ha llevado a cabo, diariamente, políticas que son difíciles de reconciliar con el seguimiento fiel de nuestro Santísimo Redentor. En particular, parece haberse empeñado en socavar la enseñanza cuidadosa de sus predecesores, notablemente los dos últimos, sobre los males del relativismo moral, y ha ignorado públicamente los llamamientos para aclarar estas apariencias. Increíblemente, el Sucesor de S Pedro es visto tanto por admiradores como por críticos como alguien que alienta a las almas por las cuales Cristo murió a sentirse cómodas en una vida de adulterio habitual. Él ha justificado descaradamente su conducta al hablar de un Dios de las Sorpresas. Hagan lío: ha tenido la temeridad de ir tan lejos como para crear un "berenjenal" en la Viña del señory luego invitar a otros a seguirle en ello.

Fue necesario, hace 1300 años, decir en una triste condena, un Papa anterior, que 'él permitió que la pureza de la Iglesia fuera contaminada'; que 'él  fomentó la herejía'. Como esto ha sucedido ya, sabemos que puede volver a suceder.

Ya sea bajo este pontífice u otro, pueden pasar años antes de que uno pueda recibir nuevamente enseñanzas que emergen del Vaticano con la confianza simple, infantil y obediente; con oídos abiertos y dispuestos. Habrá, por mucho tiempo, la inquietante, desestabilizadora ansiedad de que, en tiempos tan extraordinarios, los fríos lazos de conciencia y del deber puedan requerir una prueba de los espíritus.

Esta es la medida del daño catastrófico que Jorge Bergoglio ha hecho a su gran Cargo de mantener el Depositum Fidei, siendo una remora contra los asaltos de la novedad. En el lenguaje del Beato John Henry Newman, sentimos menos segura bajo nuestros pies la roca de la sólida cátedra de Pedro. Puede llevar décadas, como mínimo, que el buen Dios pueda sanar esta inseguridad.


Publicado por el P. John Hunwicke http://liturgicalnotes.blogspot.com.es/2018/05/a-very-personal-problem.html